Octubre 2010 – MARÍA DEL CARMEN FERNANDEZ

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2010_octubre_maria_del_carmen_fernandez1_ María del Carmen Fernández es Licenciada en Ciencias Políticas y profesora en Ciencias de la Educación de la UNR. Es Magíster en Historia de la Educación y vice presidenta de la Sociedad Argentina de Historia de la Educación.

“la importancia de la utilización de las imágenes, no solo como definición didáctica, sino como registro de lo realizado, tanto dentro como fuera de la escuela”

Por Fabio Montero

ESCUELA SERENA. EL RELATO DE LA IMAGEN

Entre Fines del siglo XIX y principios del XX comienza a definirse en Europa las primeras líneas de acción de una escuela que se apoyaría en las nuevas teorías de la psicología infantil, que comenzaban a considerar al niño como un sujeto creativo, crítico y reflexivo. Jean Piaget, uno de los precursores de esta corriente, en su trabajo Educación e instrucción, consideraba que el niño podía desplegar una auténtica capacidad de investigación y reflexión. Así comienzan a construirse las teorías pedagógicas que van a dar sustento a la creación de la Escuela Nueva o Activa.

La experiencia europea rápidamente se extendió por América Latina, alcanzando grados de desarrollo importante en países como Argentina y Uruguay.

Si bien estos noveles procesos pedagógicos no se inscribieron en políticas gubernamentales, sirvió de marco a la posibilidad de que docentes con iniciativas creadoras, pudieran llevar adelante experiencias nuevas que rompieran con los principios escolares clásicos.

En nuestro país la Escuela Nueva, conocida como Escuela Activa, dio sus primeros pasos en la ciudad de Rafaela para alcanzar un importante grado de desarrollo en la ciudad de Rosario. Ambas experiencias, estuvieron referenciadas en los nombres de Olga y Leticia Cossettini.

Desde la Escuela Normal de Rafaela, hasta la escuela Gabriel Carrasco de la ciudad de Rosario, las hermanas Cossettini desarrollaron su impronta en la denominada “Escuela Serena” cuyos ejes curriculares se apoyaban en la fuerza creadora de las fotografías, las imágenes, las esculturas, los laboratorios y el trabajo comunitario.

La Escuela Serena se desarrollo durante 15 años (1935 a 1950) y fue atravesada por gobiernos militares, conservadores y populares. El sueño de la Escuela Activa comenzó a decaer 6 años antes de su clausura definitiva cuando Leopoldo Marechal, interventor del Consejo de Educación de la provincia de Santa Fe, suprime el decreto que reconocía a la escuela su carácter de experimental. Finalmente, un 28 de agosto de 1950 Olga fue separada definitivamente de su escuela.

María del Carmen Fernández es Licenciada en Ciencias Políticas y profesora en Ciencias de la Educación de la UNR. Es Magíster en Historia de la Educación y vice presidenta de la Sociedad Argentina de Historia de la Educación. En actualidad desarrolla su función docente en el Núcleo Historia Epistemológica en Ciencias de la Educación y en el ciclo de formación docente de Historia socio política del sistema educativo.

En el año 2003, como directora de la carrera en Ciencias de la Educación de la UNR y en el marco del Seminario Permanente “Olga Cossettini”, comienza junto con un equipo de investigación, a trabajar en tres proyectos (que llegan hasta la actualidad) la experiencia que las hermanas Olga y Leticia Cossettini llevaron adelante en la escuela Gabriel Carrasco.

¿Que aspecto del trabajo de las hermanas Cossettini abordaron en el proyecto?

En el primer proyecto que se denominó: “La experiencia de la Escuela Serena en Rosario: la fuerza de la articulación entre imagen, historia y pedagogía”, nos centramos especialmente en los cuadernos, las láminas y las fotografías de los alumnos. Esto se definió debido a la cantidad y las características de esos materiales que no respondían al estereotipo de la imagen escolar. Eran imágenes hechas por niños, con perfiles muy originales que los diferenciaban de cualquier otro cuaderno de la época.

Detectamos que en esta experiencia de Escuela Nueva la articulación se vinculaba con la estética que, por otro lado, estaba en relación con el ámbito cultural y artístico expresado en las vanguardias de los años 20 en la ciudad de Rosario.

La conclusión más importante en este aspecto es la utilización de las imágenes, no solo como definición didáctica, sino como registro de lo realizado, tanto dentro como fuera de la escuela. Estos registros, estaban vinculados con aspectos artísticos, pero también, con cuestiones de investigación científica. De esto da cuenta, por ejemplo, los dibujos sobre el calendario de las nubes y los vientos, donde se plasmaba en una cuadrícula, lo que veían en el cielo, también se destacan los trabajos en microscopio, etc. Logran una especial articulación entre ciencia y arte que se manifiesta en los cuadernos y las láminas de los alumnos.

En el segundo proyecto identificamos los grandes relatos de la actividad educativa de Olga Cossettini y en el tercero abordamos las Misiones culturales desarrolladas en la Escuela Serena.

¿Como definirías esos relatos que se plasmaban a través de las imágenes?

Olga y Leticia, además de maestras, eran intelectuales vinculadas con sectores culturales locales y nacionales. Muchos artistas participaban de la vida cotidiana de la escuela, entre ellos, los fotógrafos profesionales cuyos materiales fueron utilizados para armar distintos tipos de relatos.

Hay relatos vinculados con las producciones artísticas de los alumnos (fotos de representaciones teatrales, de alumnos bailando, emitiendo el sufragio, o en las misiones culturales).

Otros relatos se arman en función de los representantes de cultura que llegaron a la escuela como Margarita Xirgu, Gabriela Mistral, Javier Villafañe, Juan Ramón Jiménez, etc. En este sentido, quedaba de manifiesto la intencionalidad de invitar a determinadas figuras, no solo a presenciar la experiencia, sino a formar parte de ella.

Hay un tercer relato, que está definido por las fotos vinculadas con las actividades de Olga en sus viajes a EEUU, Latinoamérica y Europa, muchas de ellas, en instituciones que desarrollaban propuestas similares a las de la Escuela Serena.

Finalmente podemos identificar otro relato, a través de las cartas que las Cossettini establecían con exponentes educativos y culturales locales e internacionales, entre los que se destacaban: Victoria Ocampo, Birri y funcionarios españoles e italianos del área de educación.

¿Cuál era la necesidad de dejar todo registrado?

Hay una intencionalidad de registro en cada una de las acciones realizadas en el marco de la Escuela Activa. La idea es que todo quede registrado.

Considero que esta impronta estaba vinculada con la condición de intelectuales que tenían Olga y Leticia, desde la cual, se consideraban vanguardia pedagógica de la época. Entiendo que desde esta posición, tenían la necesidad de dejar todo registrado. El archivo era tan vasto, que nos ha permitido a los investigadores tener muchos elementos para analizar la experiencia. Las Cossettini sentían que fijaban las bases de una escuela que podía llegar a trascender la experiencia de la Carrasco.

Las imágenes cumplieron una función pedagógica, pero más allá de esto, estaban formuladas para dejar registrada la tarea que se estaba desarrollando con la intención de ser replicada, pero también, con el objetivo de que la experiencia pudiera ser estudiada.

El tercer proyecto esta vinculado con las Misiones culturales ¿Cómo eran éstas?

Las misiones de divulgación cultural se desarrollaban en el mes de noviembre. Maestros y alumnos, se dirigían a distintos lugares del barrio e instituciones de Rosario donde mostraban las actividades que habían realizado durante el año, estableciendo de esta manera, una relación muy especial entre la escuela, la cultura y la comunidad. Esto, implicaba un trabajo previo de los alumnos donde preparaban aquello que iban a exponer. Los materiales apuntaban a desarrollar el conocimiento científico y artístico en una estrecha relación entre ciencia y arte. Olga, remarca en parte de sus cartas la importancia de esta experiencia social con la comunidad.

Las misiones de divulgación cultural tenían varios antecedentes, entre ellos, las desarrolladas por el pedagogo uruguayo Sabas Olaizola, que se denominó Misiones Infantiles y las de Jesualdo Sosa, también en Uruguay, denominadas Programa de Extensión Cultural. También tomaron como referencia las que llevó adelante el gobierno español durante la segunda república  

¿Cómo pudo desarrollarse la impronta de la Escuela Serena en nuestra ciudad?

La experiencia desarrollada de 1935 a 1950, atravesó un período difícil de nuestro país, donde la educación a nivel nacional estaba formulada como una educación nacionalista y católica vinculada con lo militar. En la provincia de Santa Fe, bajo el gobierno de Luciano Molina, se dicta una ley de educación común que establece principios laicos y donde remarca la importancia de adherir a los métodos activos. En el marco de esta ley, se abre una puerta para la experiencia de la escuela serena. Por otra parte, lo que le permitió desarrollarse fue el reconocimiento oficial de escuela experimental.

¿Hay condiciones en la actualidad de aplicar los principios de la Escuela Nueva?

La escuela se enmarca en un movimiento pedagógico de Escuela Nueva que tuvo vigencia en ese momento y que son ensayos y experiencias que se llevan a cabo entre 1920 y el 1930 pero luego, ese núcleo de ideas se agota en sí mismo. Replicarlo en este momento, es forzar situaciones. Considero, como historiadora de la educación, que esto tiene valor histórico pero estaría desfasada de lo que se requiere actualmente. Es importante difundir la experiencia por su valor histórico, más que como experiencia a repetir.

Los niños y las niñas del 30 no son los niños y las niñas actuales, las instituciones educativas no tienen la misma consideración, ni son vistas igual por los padres y la sociedad. La relación adulto niño es otra. Replicar esa experiencia es trasladar situaciones que se dieron en otro contexto histórico. Es como pedir que Escuela Nueva se hubiese dado a mediados del siglo XIX.

Lo que en este contexto me parece importante, es que se comiencen a reivindicar las experiencias pedagógicas desarrolladas en nuestro país y Latinoamérica que estuvieron más vinculadas con procesos democráticos que autoritarios.