Proceso de selección
La selección de personal por parte de una organización implica primeramente decisión, opciones y clasificaciones. Se trata de elegir entre los aspirantes preseleccionados o reclutados a la persona con más probabilidades de adaptarse al cargo ofrecido y de ser eficiente en su desarrollo. De esta manera, el proceso selectivo debe darle a la empresa un diagnóstico y pronóstico respecto de la futura actuación del postulante en el empleo. En definitiva, se realiza un proceso de comparación entre las exigencias que debe cumplir el ocupante del cargo y el perfil de las características de los postulantes. Por otra parte, la organización debe darle al candidato una impresión del ambiente de trabajo para que él mismo pueda decidir si quiere o no ingresar en esa organización.
Preparación del proceso de selección
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Delimitación previa de la entrevista (interiorizarse en la descripción del cargo, en los avisos publicados, determinar el formulario de solicitud, preparar las evaluaciones que se crean necesarias sean tests, preguntas, etc.).
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Buscar un lugar físico adecuado y eliminar toda posibilidad de distracción y/o interrupción de la entrevista.
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Controlar el tiempo para no extenderse demasiado y para conseguir toda la información requerida.
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Terminar claramente la entrevista e informar a todos los postulantes del resultado (tanto si es positivo como negativo) de la selección.
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Prever si el reclutamiento se hará por medio de avisos, utilizando los servicios de una consultora o bien, a través del gerente de personal. (En el caso de consultorías, analizan a fondo a todos los postulantes y luego, aconsejan a la empresa que ha ordenado la selección un máximo de tres y un mínimo de dos candidatos para que la propia empresa decida y sea única responsable final de la elección).
